Los muslos de pollo a menudo tienen más sabor y la carne es más tierna que la pechuga. Prepare unos ricos muslos de pollo con vinagre balsámico, cubriendo en papel de aluminio para producir mordidas tiernas y jugosas. El vinagre se suaviza en el horno, especialmente al añadir un poco de vino y sólo necesita un puñado de ingredientes para hacer un plato fácil, delicioso y satisfactorio.
Muslos de pollo con vinagre balsámico
Ingredientes
- 1 libra de muslos de pollo sin piel
- Sal y pimienta
- Aderezo griego o italiano (para marinar, opcional)
- Vino blanco
- 1/2 cucharadita de jengibre molido
- 1 1/2 taza de vinagre balsámico
- Queso parmesano rallado
Preparación
- Seque los muslos con palmaditas suaves y frote un poco de sal y pimienta. Si tiene tiempo, deje marinar los muslos en un poco de aderezo griego o italiano, o en un poco de vinagre balsámico mezclado con aceite de oliva durante la noche.
- Precaliente el horno a 425 º. Coloque los muslos en una fuente de horno profunda.
- En un recipiente aparte, combine el vinagre balsámico, un poco de vino blanco, y el jengibre. Mezcle y vierta sobre el pollo. Estas son cantidades aproximadas, puede utilizar más o menos dependiendo de la cantidad que cubra el pollo y su gusto.
- Cubra el recipiente con papel aluminio y cocine el pollo durante unos 45 a 60 minutos o hasta que los jugos salgan claros. Retire el papel aluminio y adorne con queso parmesano. Sirva con arroz, fideos o pan para absorber la salsa.