Las mascarillas faciales son una delicia para la piel especialmente si es de arcilla y chocolate. Pruebe este deliciosa mascarilla facial de arcilla y cacao para sanar y refrescar su piel.
La arcilla de caolín o arcilla blanca es una arcilla suave adecuada para todos los tipos de piel que limpia las purezas de la piel. El cacao es rico en antioxidantes para ayudar a reparar la piel y reducir la inflamación. El cacao también contiene cobre, hierro, manganeso, magnesio y zinc que pueden promover el crecimiento celular sano, en conjunto estos ingredientes pueden ayudar a que su piel se sienta fresca y limpia, a la vez que ofrecen los beneficios aromáticos del chocolate.
Usar té verde en esta mascarilla en lugar de agua destilada puede ofrecer beneficios antioxidantes y antiinflamatorios adicionales, lo cual es particularmente útil para los ojos cansados.
Mascarilla de Arcilla de Caolín y Cacao
Ingredientes:
1 cucharada de Arcilla de Caolín en polvo
1 cucharada de Cacao Crudo en polvo
1 cucharada de Agua Destilada o Té Verde frío
Modo de Preparación:
1. Mezcle bien la arcilla y el cacao en un cuenco.
Agregue agua purificada o té verde frío para producir una pasta de consistencia media, que no sea ni demasiado espesa, ni demasiado líquida.
2. Utilizando sus dedos (o un pincel limpio), aplique una capa fina de la mezcla pero uniformemente distribuida en su cara con movimientos ascendentes, prestando especial atención a las zonas más problemáticas, pero evitando los ojos y los labios.
3. Permita que la mascarilla se seque durante 15 minutos y aproveche esta oportunidad para relajarse.
4. Una vez que la mascarilla se haya secado ligeramente, enjuague suavemente su cara con agua tibia y seque suavemente con una toalla limpia.
* Si lo desea, puede lavar us rostro con un limpiador facial suave y usar tónico, pero lo más importante, que no se puede olvidar es hidratar la piel. Esta mascarilla no es recomendada para personas con eczema. Si tiene piel sensible, primero haga una prueba en un área pequeña y espere 24 horas para asegurarse que no tenga reacciones adversas.