El eccema es una reacción alérgica que se desarrolla en un ciclo de enrojecimiento, picazón y más enrojecimiento y picor, ya que el rascarse y frotarse agrava aún más la piel. Las áreas afectadas pueden romperse, desarrollar ampollas, costras o descamación, y puede botar un líquido claro. Las personas con eccema tienen un mayor riesgo de desarrollar infecciones de la piel, tales como estafilococos.
- El eccema puede surgir en cualquier lugar del cuerpo, aunque las zonas comunes son en los pliegues de la piel, en las mejillas y en el dorso de las manos, la parte superior de los brazos y la parte delantera de las piernas.
- Esta condición se puede desarrollar a cualquier edad, incluso durante la infancia. Por lo general comienza antes de los 5 años. Alrededor del 40% de los niños se alivian de su eccema. Otros experimentan ataques durante toda su vida. El eccema tiende a heredarse en las familias, especialmente aquellos propensos a las alergias y el asma.
- Los factores desencadenantes incluyen los cambios de temperatura, la piel seca, los irritantes, tales como la lana, tintes, cosméticos, perfumes y jabones, también alimentos, especialmente huevos, cacahuates, pescado, soja, trigo y productos lácteos, así como el estrés, el polvo, polen y el pelo de animales.
- Es importante mantener la piel limpia y bien hidratada. Los esteroides tópicos pueden mejorar el enrojecimiento y la picazón. Los inmunomoduladores tópicos como Elidel (pimecrolimús) y Protopic (tacrolimús) puede mejorar la picazón y el enrojecimiento, pero sólo deben usarse por períodos cortos de tiempo. Los antihistamínicos orales pueden mejorar la comezón. En los casos graves, los esteroides orales, como Trexall (metotrexato), Sandimmune (ciclosporina) o Imuran (azatioprina) pueden ser necesarios. Otro componente importante del cuidado de la piel es tomar duchas cortas, con agua tibia (no caliente) y usar un limpiador sin jabón. Además, debe aplicar crema hidratante en todo el cuerpo dentro de los tres minutos de salir de la ducha.
También vea: Aceite de Orégano: Una Cura Natural para el Eccema y Otras Formas de Dermatitis
