Las fresas son conocidas por sus deliciosas frutas, y por lo general se cultivan al aire libre. Pero, también las fresas se cultivan a partir de semillas en el interior para facilitar el acceso. Las fresas que se cultivan en interiores deben ser colocadas bajo luz solar adecuada, y ser plantadas en una tierra con el nivel de pH adecuado para que prosperen y produzcan un buen cultivo de fresas.
1. Llene una maceta con tierra mezclada con una pequeña cantidad de fertilizante.
2. Perfore tres agujeros de 1 pulgada de profundidad en el suelo con el dedo.
3. Coloque tres semillas de fresa en cada agujero. Llene los agujeros con tierra para macetas.
4. Aplaste el suelo para eliminar las bolsas de aire y evitar la formación de hongos.
5. Riegue toda la maceta.
6. Coloque la maceta en una ventana que reciba al menos seis horas de luz solar diario. Si no hay ventanas para este propósito, coloque la planta bajo luz artificial, como las luces de crecimiento, durante 12 horas al día.
7. Fertilice la planta después de tres semanas de crecimiento, utilizando un fertilizante de liberación lenta ligeramente ácido. Fertilice sus fresas aproximadamente una vez cada dos semanas cuando están en flor.
