¿Busca una forma eficiente y sana de obtener más de su jardín? ¿Quiere estar seguro de que su comida no contiene plaguicidas y otras inmundicias que a menudo se rocían sobre los cultivos comerciales? Cultivar alimentos a partir de sus desechos de cocina es una buena manera de hacerlo. No hay nada como comer sus propias legumbres, y hay un montón de diferentes alimentos que vuelven a crecer a partir de los pedazos que normalmente desechamos o ponemos en el cubo de compostaje.
Es divertido. Y muy sencillo… si sabe cómo hacerlo.
Sólo recuerde … que la calidad de las verduras que elija sembrar le ayudará a determinar la calidad de las verdura que crecerán. Así que, siempre que sea posible, se recomienda comprar productos orgánicos locales, para asegurarse que sus plantas sean frescas, sanas, sin químicos ni manipulación genética.
Alimentos que Puede Cultivar a partir de Desechos de la Cocina
Puerros, Cebollinos e Hinojo
Usted puede utilizar la punta de la raíz blanca de un vegetal que ya ha cortado, o comprar un puñado nuevo para utilizar específicamente en el cultivo.
Simplemente coloque el extremo de la raíz blanca en un tarro de cristal con un poco de agua, y deje en un lugar soleado. La parte de hoja verde de la planta continuará creciendo. Cuando vaya a cocinar, corte lo que necesita del crecimiento verde con tijeras y deje el extremo de la raíz blanca en el agua para que continúe creciendo. Renueve el agua cada semana más o menos, y usted nunca tendrá que comprar ramilletes de cebollinos, puerro o hinojo de nuevo.
Limoncillo
El limoncillo crece al igual que cualquier otra hierba. Para propagarla, coloque el extremo de la raíz (después de haber cortado el resto) en un frasco de vidrio con un poco de agua y deje en un lugar soleado.
Dentro de una semana, verá un crecimiento nuevo. Transplante su limoncillo en una maceta y deje en el sol al aire libre. Usted puede cosechar su hierba cuando los tallos alcanzan alrededor de un pie de altura, corte o que necesita y deje que la planta siga creciendo.
Apio, Col, Lechuga Romana y Col China
Al igual que los puerros, estas verduras volverán a crecer desde la raíz. Corte los tallos de la manera habitual, y coloque el extremo de la raíz en una taza de agua, suficiente para cubrir las raíces, pero no la parte de arriba del corte. Colóquelo en una la ventana soleada, de vez en cuando riegue para mantener la tierra húmeda.
Después de unos días, comenzarán a aparecer las raíces y hojas nuevas. Después de una semana más o menos, trasplante sus lechugas en el suelo o maceta con las hojas por encima del nivel del suelo. La planta continuará creciendo, y dentro de unas semanas brotará una nueva cabeza entera.
Alternativamente, usted puede plantar su corte directamente en el suelo (sin iniciar el proceso en el agua), pero usted tendrá que mantener el suelo muy húmedo durante la primera semana hasta que los nuevos brotes comiencen a aparecer.
Gengibre
El jengibre es muy fácil de cultivar. Simplemente siembre un pedazo de rizoma de jengibre (el pedazo nudoso grueso que usa para cocinar) en una maceta con tierra con los brotes nuevos (es decir, los más pequeños) hacia arriba. El jengibre prospera en luz filtrada, no directa, en un ambiente cálido y húmedo.
En poco tiempo comenzará a notar brotes y raíces nuevas. Una vez que la planta esté establecida ya estará lista para la cosecha, simplemente tire de la planta, raíces y todo. Corte un trozo de rizoma, y vuelva a sembrar para que se repita el proceso.
El jengibre también es una planta interior muy atractiva, por lo que si usted no utiliza mucho jengibre en su cocina todavía puede disfrutar de la hermosa planta entre las cosechas.
Papas
Volver a cultivar las papas es una buena forma de evitar el desperdicio, ya que se puede volver a cultivar papas de cualquier papa vieja que tenga ‘ojos’ creciendo. Escoja con ojos robustos, y corte en pedazos alrededor de 2 pulgadas cuadradas, lo que garantiza que cada pedazo tenga por lo menos uno o dos ojos. Deje los pedazos cortados a temperatura ambiente durante un día o dos, para que los pedazos se sequen. Esto evita que el pedazo de papa se pudra después sembrarla, lo que garantiza que los brotes nuevos obtengan la máxima nutrición de cada pedazo de papa.
Las plantas de papa prosperan en suelos rico en nutrientes, sí que es mejora abonar el suelo antes de plantarlas. Plante sus trozos de papas alrededor de 8 pulgadas de profundidad con los ojos mirando hacia arriba, y cubra con 4 pulgadas de tierra. Cuando la planta comience a crecer y aparezca más raíces, agregue más tierra para ayudar con su crecimiento.
Ajo
Usted puede volver a cultivar toda una planta de ajo usando un solo diente, sólo plántelo, con la punta hacia arriba, en un sitio cálido con un montón de luz solar directa. El ajo producirá raíces y brotes nuevos. Una vez que la planta esté establecida, corte los brotes y la planta producirá ajos sabrosos. Así como el jengibre, puede repetir el proceso con el nuevo diente.
Cebollas
Las cebollas son una de las hortalizas más fáciles de propagar. Simplemente corte el extremo de la raíz de la cebolla, dejando ½ pulgada de cebolla en las raíces. Colóquela con la punta hacia abajo en un lugar soleado en su jardín y cubra con el tierra. Asegúrese de que el suelo se mantenga húmedo. Las cebollas prefieren un ambiente cálido y soleado, así que si usted vive en un clima más frío, mantenga las macetas en el interior durante los meses gélidos.
A medida que utiliza sus cebollas cultivadas en casa, vuelva a sembrar la raíz que corta, y no tendrá que comprar cebollas de nuevo.
Batatas
Cuando se siembra, la batata (camotes) producirá brotes oculares como un papa. Entierre toda o parte de una batata bajo una capa delgada de tierra en un lugar soleado y húmedo. Los brotes nuevos comenzarán a aparecer a través del suelo en una semana más o menos. Una vez que los brotes alcanzan alrededor de diez centímetros de altura, corte y vuelva plantarlos dejando cerca de 12 pulgadas de espacio entre cada planta. Tomará alrededor de 4 meses para que sus batatas estén listas. Mientras tanto, esté al tanto de las babosas … les encantan las batatas.
Para propagar la batata, es esencial utilizar una fuente orgánica ya que la mayoría de los cultivadores comerciales rocían sus batatas para evitar que broten.
Setas
Las setas (champiñones) se pueden propagar a partir de esquejes, pero son una de las legumbres más difíciles para volver a cultivar. Las setas no sólo disfrutan de humedad y calor y un suelo rico en nutrientes, pero tienen que competir con otros hongos para sobrevivir. Aunque no es su clima preferido, los climas más frescos dan a las setas una mejor oportunidad de ganar la competencia contra otros hongos.
Prepare una mezcla de tierra y compost en una maceta (no directamente en el suelo) para que su crecimiento sea portátil y se puede controlar la temperatura de las setas. Ponga bajo luz filtrada cálida durante el día y una temperatura fresca por la noche. Basta con retirar la cabeza de la seta y sembrar el tallo, dejando sólo la parte superior expuesta. En las condiciones adecuadas, la base crecerá una cabeza entera nueva.
Piña
Para volver a cultivar piñas, es necesario retirar la corona de hoja verde en la parte superior y asegurarse que no haya fruta pegada. Puede agarrar la corona con firmeza por las hojas y girar para arrancarla, o puede cortar la parte superior de la piña y quitar la pulpa restante con un cuchillo (de lo contrario se pudre después de la siembra y puede matar a la planta). Corte secciones pequeñas, horizontales desde la parte de abajo de la corona cuidadosamente hasta que vea brotes de raíz (los pequeños círculos en la base plana del tallo). Retire las pocas capas inferiores de hojas dejando aproximadamente una pulgada de base en la parte inferior del tallo.
Siembre su corona de piña en un ambiente cálido y bien drenado. Riegue su planta regularmente al principio, reduciendo el riego a semanal una vez que la planta esté establecida. Usted verá un crecimiento en los primeros meses pero tenga en cuenta que tomará alrededor de 2 a 3 años antes de poder comer sus piñas.
