Ser fluente culturalmente significa ser capaz de entrar en un contexto nuevo, dominar las normas, y sentirse cómodo haciéndolo.
Si usted debe trabajar con una cultura desconocida, como gerente, usted debe modificar su comportamiento para adaptarse a las normas culturales. Esto puede ser difícil, sobre todo si le hace sentir poco auténtico. Pruebe estos tres consejos si se enfrenta con esa situación:
- Identifique el problema. Identifique lo que le molesta. Por ejemplo, en una cultura que valora un estilo de liderazgo diferente, ¿Está luchando para proporcionar directrices claras?
- Ajuste su comportamiento. Haga pequeños ajustes, pero significativos que se refleje en la cultura que está trabajando y manténgase fiel a sus valores. Usted no tiene que gritar a los empleados, pero podría ser más asertivo.
- Reconozca el valor. Si bien puede que tenga que comportarse de un modo contra intuitivo, debe centrarse en el resultado deseado.