Los efectos nocivos de azúcar van más allá que el consumo de calorías vacías. El exceso de azúcar es tan poco saludable que es, probablemente, el peor de los ingrediente en la dieta moderna. Estos son los 9 mejores razones para evitar el azúcar como si su vida dependiera de ello.
1. El exceso de azúcar aumenta la fructosa
La razón por la que el exceso de azúcar (y su gemelo malvado, el jarabe de fructosa) es perjudicial, es porque proporciona una gran cantidad de fructosa.
El azúcar es mitad glucosa y fructosa. La glucosa es esencial, y puede ser metabolizada por casi todas las células en el cuerpo. Si no lo conseguimos en la dieta, nuestro cuerpo la fabrica a partir de proteínas y grasas.
La fructosa, sin embargo, no es esencial para nuestro funcionamiento en modo alguno. El único órgano que puede metabolizar la fructosa es el hígado.
Cuando grandes cantidades de fructosa entran en el hígado, el cual ya está lleno de glucógeno, la mayor parte de la fructosa se convierte en grasa. Po lo tanto, cuando comemos una gran cantidad de fructosa, muchas cosas en el cuerpo empiezan a funcional mal.
Este proceso es, probablemente, una de las principales causas de las epidemias de muchas enfermedades crónicas.
Nos gustaría señalar que esto no se aplica a las frutas, que son muy nutritivas con una gran cantidad de vitaminas, minerales, fibra y agua.
2. El azúcar no contiene vitaminas ni minerales
El azúcar es calorías vacías. No hay duda sobre eso. La mayoría de los alimentos ricos en azúcar como pasteles, refrescos y golosinas contienen muy pocos nutrientes esenciales.
Las personas que consume éstos en exceso en lugar de otros alimentos más nutritivos probablemente tienen deficiencia de muchos nutrientes importantes.
3. El azúcar causa depósitos de grasa en el hígado
Como ya dijimos antes, cuando comemos fructosa se va al hígado.
Si el glucógeno del hígado es bajo, como por ejemplo después de correr o trotar, la fructosa se utilizará para reponerla.
Sin embargo, la mayoría de las personas no hacen un entrenamiento largo antes de consumir fructosa y sus hígados ya están llenos de glucógeno.
Cuando esto sucede, el hígado convierte la fructosa en la grasa. Parte de la grasa se expulsa, pero parte permanece en el hígado. La grasa se puede acumular con el tiempo y en última instancia conducir a tener el hígado graso.
4. El azúcar aumenta el colesterol malo y los triglicéridos
La mayor parte de la grasa generada en el hígado son enviadas como lipoproteína, partículas de muy baja densidad. Estas partículas son ricas en triglicéridos y colesterol malo.
En un estudio controlado, los sujetos fueron asignados a beber 25 % de calorías ya sea como una bebida endulzada con glucosa o fructosa durante 10 semanas.
El grupo de la fructosa tenía:
Aumentos en los triglicéridos en sangre.
Aumentos en el nivel del colesterol malo.
Aumento del nivel de glucosa e insulina.
Disminución de la sensibilidad a la insulina.
Aumento de la grasa en la cavidad abdominal (grasa visceral).
Básicamente, un 25% de calorías en forma de fructosa perjudica significativamente los lípidos en sangre y causa rasgos característicos del síndrome metabólico, que es un paso hacia la obesidad, enfermedades del corazón, diabetes y una vida (corta) de mala salud.
5. El azúcar causa resistencia a la insulina
La función principal de la insulina es conducir la glucosa de la sangre a las células. Pero cuando comemos una dieta inadecuada, las células tienden a ser resistentes a los efectos de la insulina.
Cuando esto sucede, el páncreas comienzan a secretar más insulina para eliminar la glucosa de la sangre, porque el exceso de glucosa en la sangre es tóxico. Así es como la resistencia a la insulina conduce a niveles elevados de insulina en la sangre.
Pero la insulina también tiene otra función importante: le indica a las células de grasa que recojan y retengan la grasa de la sangre. Así es como la insulina causa la obesidad.
Cuando el cuerpo llega a ser aún más resistentes a la insulina, las células beta en el páncreas se dañan con el tiempo y pierden la capacidad de producir suficiente insulina. Así es como causa la diabetes de tipo II, que en la actualidad afecta a unos 300 millones de personas en todo el mundo.
El exceso de fructosa es una causa conocida de resistencia a la insulina y de niveles elevados de insulina en la sangre.
6. El azúcar aumenta el riesgo de varias enfermedades
El exceso de consumo de azúcar se ha asociado con muchas enfermedades. En todo caso, el azúcar es el principal factor que contribuye a la mala salud.
El azúcar se ha asociado con:
Obesidad: El azúcar causa el aumento de peso a través de diversos mecanismos, incluyendo un nivel elevado de insulina y la resistencia a la leptina.
Diabetes: El azúcar es probablemente una de las principales causas de la diabetes.
Enfermedades cardiovasculares: Eleva el colesterol malo, los triglicéridos y causa varias otrosproblemas que en última instancia puede conducir a enfermedades del corazón.
7. El azúcar no sacia el apetito
La zona en el cerebro llamada hipotálamo se supone que debe regular la ingesta de alimentos.
En un estudio publicado en el 2013, dos grupos bebieron una bebida endulzada con glucosa o una bebida endulzada con fructosa.
Los bebedores de glucosa habían disminuido el flujo de sangre en el hipotálamo y se sentían saciados, mientras que los bebedores de fructosa aumentaron el flujo de sangre en esta área del cerebro. Los bebedores de fructosa se sentían menos satisfechos y se quedaron con hambre.
Otro estudio reveló que la fructosa no redujo los niveles de la hormona de hambre grelina como la glucosa. Cuanto más grelina tenga, más hambre sentirá, ingiriendo más calorías.
8. El azúcar es adictivo
Cuando comemos el azúcar, ésta libera dopamina en el cerebro, que nos da una sensación de placer. Esto es en realidad cómo el abuso y la adicción a una sustancia funcionan.
Nuestro cerebro siempre está buscando actividades que liberan dopamina. La sctividades que liberan una enorme cantidad son especialmente deseables.
En ciertas personas con una cierta predisposición a la adicción, esto provoca un comportamiento de búsqueda de recompensa típica.
Los estudios demuestran que se puede, de hecho, ser físicamente adicto al azúcar. Muchas personas consumen el azúcar y otros alimentos poco nutritivos en un patrón que es típico de los adictos.
9 . El azúcar causa la resistencia a la hormona llamada leptina
La leptina es una hormona que es secretada por las células grasas. Mientras más grasa tenemos, más leptina es secretada. Esto se supone que funciona como una señal para indicar al cerebro que estamos llenos y hay que dejar de comer. También se supone que aumenta nuestro gasto energético.
Las personas obesas en realidad tienen altos niveles de leptina, pero el problema es que la leptina no está funcionando. Esto se llama resistencia a la leptina y es una razón importante por la que la gente come más calorías de las que queman.
La fructosa es una causa conocida de la resistencia a la leptina, tanto porque la insulina bloquea la señal de la leptina en el cerebro y porque la fructosa aumenta los triglicéridos en sangre que también bloquea sus efectos. Esto hace que nuestro cerebro piensa que las células de grasa están vacías y que tiene que seguir comiendo.
La fuerza de voluntad es muy débil en comparación con la señal de hambre que la leptina envía. Esta es la razón la gente no puede simplemente comer menos. Para revertir la resistencia a la leptina y hacer que el cerebro quiere comer menos, debe evitar el azúcar a toda costa.