Una infección viral es diferente a una infección bacteriana. Por un lado, un virus no responde bien al tratamiento con antibióticos. A los virus muchas veces hay que permitirles correr su curso, y al mismo tiempo tratar los síntomas lo mejor que se puede.
- Fortalezca su cuerpo con mecanismos que combaten las infecciones. Tome mucha vitamina C y aliméntese bien.
- Añada más líquido a su dieta. El agua es una necesidad. Se encarga de vaciar las toxinas y mantiene el cuerpo hidratado. La fiebre quema el agua en el sistema, por lo que es una necesidad reponer el suministro con frecuencia.
- Tome cápsulas de extracto de hoja de olivo. Los antibióticos suelen ser más eficaces para las infecciones bacterianas y hacen poco para ayudar al cuerpo a deshacerse de un virus. Hay hierbas, como la equinácea, que también ayuda a combatir las infecciones.
- Descanse mucho, de ocho a 10 horas para luchar contra un virus. Acuéstese y trate de mantenerse relajado, incluso si usted no puede dormir. Su resistencia está baja, así que mientras más activo sea, más tiempo le tomará para recuperarse.
- Permita que la fiebre siga su curso. En realidad, esto puede reducir la cantidad de tiempo que pasa enfermo. Cuanto mayor sea la temperatura del cuerpo, es menos probable que el virus vaya a sobrevivir por mucho tiempo. Las fiebres mayores de 101 o 102 grados F deben ser reportadas a su médico.